ESPECIAL. Uno de los ingresos más importantes que se generan en el país son las remesas de los migrantes; ese rubro se ha convertido en el sostén de la economía local; sin embargo, los problemas que provoca la migración también son bastante alarmantes y, hasta la fecha, no existe una política que, aunque no los elimine, por lo menos concientice a la gente de los efectos.
La semana anterior, la red Urb-AL 14 y la Municipalidad de Riobamba organizaron el segundo seminario de economía local, en el que se abordó el tema de las remesas de los migrantes y como estos ingresos contribuyen al desarrollo de las familias que se quedan en el país. Pero a su vez, como estos rubros son invertidos en el país cuando llegan a manos de los familiares de los migrantes.
Martha Martines, directora (e) de la dirección de proyectos del Municipio de Riobamba, manifestó que el seminario sirvió para generar debate y sobre todo crear conciencia de lo que esta pasando alrededor de las remesas… “la experiencias darán a conocer como se manejan las entidades financieras en algunas provincias con el dinero de la remesas…buscaremos generar más actividades para tener un análisis mucho más completo”.
Las remesas de los migrantes, que constituyen el segundo rubro de ingreso de divisas al país, desde la crisis económica de 1999, se las puede considerar como un estímulo para el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y sobre todo han contribuido en el mejoramiento de las condiciones de vida de la mayoría de los ecuatorianos, especialmente de las familias de los migrantes, cuyos ingresos han mejorado, gracias al impacto que la inversión de las remesas ha tenido sobre la economía.
Estos rubros llegan directamente a las familias y son destinadas a gastos de subsistencia, al pago de deudas por la movilización del migrante, al consumo de bienes muebles e incluso para la adquisición de bienes raíces y en la construcción de viviendas; claro los gastos dependen de la magnitud de los recursos ingresados mensualmente por el viajero.
Ahora, los gobiernos locales y el gobierno central están empeñados en, si bien es cierto no parar con la migración, ya que es un factor sumamente difícil; sin embargo se intenta que este proceso se lo haga en mejores condiciones, que la gente que se va y la que se queda pueda lograr mejores condiciones de vida, no solamente en el aspecto económico, sino también para utilizar el dinero de las remesas de mejor manera.
Las remesas han sufrido un crecimiento significativo
Según cifras del Banco Central del Ecuador, los rubros por las remesas se han incrementado considerablemente durante los últimos años. Por ejemplo, en 1993, por concepto de remesas llegaron al país 201 millones de dólares y en relación al 2006 se encuentra la cifra de 2916 millones; esto implica que en tres años, el rubro se ha incrementado en un aproximado de 15 veces.
Galo Viteri, coordinador de Análisis de Coyuntura de la Subsecretaria Económica del Ministerio de Economía y Finanzas, indicó que de acuerdo a las cifras del BCE, para el año 2006, las remesas se destinaron: a gastos el 71,2 por ciento; para inversión el 20, 9 por ciento; para ahorros el 0,9 por ciento; y, otros rubros el 7 por ciento.
De los datos que arroja el BCE, las remesas que llegan al Ecuador más se gasta en manutención del hogar con el 63.6 por ciento; artículos de hogar el uno por ciento; salud 6,4 por ciento; y, viajes y vehículos el 2 por ciento.
En cambio en lo que más se invierte es en: deudas con 5.2 por ciento, educación 13,8 por ciento, construcción 1,2 por ciento, financieras 0,5 por ciento y terrenos 0,2 por ciento.
“Hay que tener en cuenta que las remesas son importantes para la economía del país, ya que aumentan el ingreso nacional, apoyan la balanza de pagos, amplían el consumo interno y fortalecen el ahorro… el Gobierno tiene que hacer todos los esfuerzos para canalizar los recursos de las remesas y que se destinen a actividades productivas”, dijo Viteri.
Las cifras del BCE evidencian que hay un crecimiento de las remesas respecto al primer trimestre del 2003, en consecuencia se espera que éstas sigan creciendo de manera significativa.
Incluso se puede señalar que las remesas fortalecen el sistema dolarizado en el país, “son tan importantes que superan los montos provenientes de inversión extranjera y aportan con cerca del 8 por ciento del PIB”, destacó el funcionario.
Si se habla de los ingresos por regiones, las remesas son más altas en el Austro con el 34,7 por ciento; el Litoral con 33,2 por ciento; la región Interandina con 28,7 por ciento; la Amazonia con 2,7 por ciento; e Insular con 0,7 por ciento. Esto responde a la caracterización y obedece a los principales estratos que migran al exterior; es por eso que se ha determinado un aproximado de 3 millones de ecuatorianos fuera del país.
La migración ha existido desde siempre y es un derecho permitido
Para María Chávez, docente de la Universidad Andina Simón Bolívar, los flujos migratorios han existido durante toda la humanidad y por eso es inherente a los seres humanos, incluso manifestó que no se podrían entender las realidades actuales sin entender esos flujos migratorios.
“Han existido épocas importantes que han permitido la ocupación de los territorios en el planeta y otros procesos de migración que han estado relacionados con expansión de estados, instituciones y procesos de colonización”, explicó la docente.
Se habla entonces, en la Carta de los Derechos Humanos se reconocen dos derechos fundamentales: el derecho a la libre circulación y la libre residencia, lo que implica su incidencia en el planeta entero y la libertad de movilización de un país a otro; sobre todo el derecho a escoger donde residir.
Esta libertad es regulada por los estados nacionales y es responsabilidad de los estados establecer las leyes que permitan viabilizar este derecho, no obstaculizarlo… “las políticas migratorias y las medidas para que una personas ingrese a un país deberían estar encaminadas a facilitar este proceso, no ha restringirlos”.
La migración se mueve dentro de una gran paradoja; el mundo se globaliza, sin embargo la movilidad de las personas se ha restringido de tal manera que uno de los problemas más generales es la migración en condiciones irregulares; más no considerados como ilegales, ya que se rompería con el derecho a la libre circulación y movilidad. Lo ilegal se asocia con un acto delincuencial y la migración es un derecho permitido.
La investigación continúa, la realidad es diferente en las comunidades
Miguel Caguana, miembro del Centro de Desarrollo e Investigación Rural del Cañar (CEDIR), señalo que hay que partir de la realidad misma de las comunidades, es por eso que considera que el tema de migración en el Austro ecuatoriano data desde los años 60-70, pero que el trabajo es reciente dentro de la organización.
El objetivo de los estudios realizados, que inician en los años 90, dentro de las comunidades indígenas, parte de analizar el proceso migratorio, “por qué se da, quiénes se van, por qué se van, dónde se van”.
Además, el CEDIR lo que busca es estudiar el peso de las remesas en la economía campesina, “es un trabajo que inició hace cuatro meses atrás y se ha convertido en una preocupación, ya que muchas financieras piensan que con la migración hay dinero y eso no es así, no existe tal desarrollo con la migración”.
Esto se lo puede avizorar en el tema de los servicios básicos dentro de las comunidades, ya que cierto es que existe inversión en la construcción de viviendas; sin embargo no se aprecia la dotación de agua potable, alcantarillado, entre otros.
En base a los estudios recientes, Caguana aseguró que la gente migra por dos causas fundamentales: una es coyuntural, debido a la crisis política y económica suscitada en los años 90-2000, producto de la globalización liberal; la otra razón es estructural, debido al crecimiento demográfico, la tenencia de la tierra y el minifundio. Sin embargo, se puede asegurar que un 60 por ciento de los migrantes lo hacen por causas de la pobreza y por falta de empleo.
A esto se suma que el 80 por ciento de migrantes corresponden a una edad entre 20 y 40 años, pero no se descarta que un mínimo porcentaje corresponda a menores de 20 y mayores de 40 años. “El efecto de la migración es en el territorio local, regional y nacional, no solo en el exterior y estos ha generado cambios en el aspecto cultural dentro de las comunidades”, dijo Caguana.
Chimborazo: los familiares de migrantes están atentos a las remesas
Fernando Morales, presidente de Famigrach, una organización de familiares de migrantes en Chimborazo, manifestó que solo en un colegio de la localidad se ha detectado un 20 por ciento de estudiantes que tienen a sus familias fuera del país, esto dentro de una población de 3 mil estudiantes, lo que significaría que alrededor de 600 estudiantes están dentro de la problemática.
Estas cifras influyen de manera psicológica y en las relaciones interpersonales de los estudiantes, lo lamentable es que la situación en el país no ha cambiado, dijo Morales, “mucha gente salió sin pensar en el costo de los problemas que se ha generado, la desatención de los familiares ha propiciado mucha depresión, especialmente en los adolescentes”.
No existe un dato concreto de cuántos chimboracenses han migrado al exterior, pero se habla de un porcentaje que oscila los 25 a 30 por ciento de la población la que ha salido fuera del país, “no son personas extremadamente pobres, son profesionales jóvenes que no encuentran cabida para demostrar la valía que tienen”.
En cuanto a las remesas, éstas si llegan de forma normal; sin embargo se han presentado dificultades, ya que no todas las familias son honestas, esto porque no utilizan el dinero en beneficio de las personas, “conocemos que los jóvenes en productos lujosos y cosas que no necesitan”.
La semana anterior, la red Urb-AL 14 y la Municipalidad de Riobamba organizaron el segundo seminario de economía local, en el que se abordó el tema de las remesas de los migrantes y como estos ingresos contribuyen al desarrollo de las familias que se quedan en el país. Pero a su vez, como estos rubros son invertidos en el país cuando llegan a manos de los familiares de los migrantes.
Martha Martines, directora (e) de la dirección de proyectos del Municipio de Riobamba, manifestó que el seminario sirvió para generar debate y sobre todo crear conciencia de lo que esta pasando alrededor de las remesas… “la experiencias darán a conocer como se manejan las entidades financieras en algunas provincias con el dinero de la remesas…buscaremos generar más actividades para tener un análisis mucho más completo”.
Las remesas de los migrantes, que constituyen el segundo rubro de ingreso de divisas al país, desde la crisis económica de 1999, se las puede considerar como un estímulo para el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y sobre todo han contribuido en el mejoramiento de las condiciones de vida de la mayoría de los ecuatorianos, especialmente de las familias de los migrantes, cuyos ingresos han mejorado, gracias al impacto que la inversión de las remesas ha tenido sobre la economía.
Estos rubros llegan directamente a las familias y son destinadas a gastos de subsistencia, al pago de deudas por la movilización del migrante, al consumo de bienes muebles e incluso para la adquisición de bienes raíces y en la construcción de viviendas; claro los gastos dependen de la magnitud de los recursos ingresados mensualmente por el viajero.
Ahora, los gobiernos locales y el gobierno central están empeñados en, si bien es cierto no parar con la migración, ya que es un factor sumamente difícil; sin embargo se intenta que este proceso se lo haga en mejores condiciones, que la gente que se va y la que se queda pueda lograr mejores condiciones de vida, no solamente en el aspecto económico, sino también para utilizar el dinero de las remesas de mejor manera.
Las remesas han sufrido un crecimiento significativo
Según cifras del Banco Central del Ecuador, los rubros por las remesas se han incrementado considerablemente durante los últimos años. Por ejemplo, en 1993, por concepto de remesas llegaron al país 201 millones de dólares y en relación al 2006 se encuentra la cifra de 2916 millones; esto implica que en tres años, el rubro se ha incrementado en un aproximado de 15 veces.
Galo Viteri, coordinador de Análisis de Coyuntura de la Subsecretaria Económica del Ministerio de Economía y Finanzas, indicó que de acuerdo a las cifras del BCE, para el año 2006, las remesas se destinaron: a gastos el 71,2 por ciento; para inversión el 20, 9 por ciento; para ahorros el 0,9 por ciento; y, otros rubros el 7 por ciento.
De los datos que arroja el BCE, las remesas que llegan al Ecuador más se gasta en manutención del hogar con el 63.6 por ciento; artículos de hogar el uno por ciento; salud 6,4 por ciento; y, viajes y vehículos el 2 por ciento.
En cambio en lo que más se invierte es en: deudas con 5.2 por ciento, educación 13,8 por ciento, construcción 1,2 por ciento, financieras 0,5 por ciento y terrenos 0,2 por ciento.
“Hay que tener en cuenta que las remesas son importantes para la economía del país, ya que aumentan el ingreso nacional, apoyan la balanza de pagos, amplían el consumo interno y fortalecen el ahorro… el Gobierno tiene que hacer todos los esfuerzos para canalizar los recursos de las remesas y que se destinen a actividades productivas”, dijo Viteri.
Las cifras del BCE evidencian que hay un crecimiento de las remesas respecto al primer trimestre del 2003, en consecuencia se espera que éstas sigan creciendo de manera significativa.
Incluso se puede señalar que las remesas fortalecen el sistema dolarizado en el país, “son tan importantes que superan los montos provenientes de inversión extranjera y aportan con cerca del 8 por ciento del PIB”, destacó el funcionario.
Si se habla de los ingresos por regiones, las remesas son más altas en el Austro con el 34,7 por ciento; el Litoral con 33,2 por ciento; la región Interandina con 28,7 por ciento; la Amazonia con 2,7 por ciento; e Insular con 0,7 por ciento. Esto responde a la caracterización y obedece a los principales estratos que migran al exterior; es por eso que se ha determinado un aproximado de 3 millones de ecuatorianos fuera del país.
La migración ha existido desde siempre y es un derecho permitido
Para María Chávez, docente de la Universidad Andina Simón Bolívar, los flujos migratorios han existido durante toda la humanidad y por eso es inherente a los seres humanos, incluso manifestó que no se podrían entender las realidades actuales sin entender esos flujos migratorios.
“Han existido épocas importantes que han permitido la ocupación de los territorios en el planeta y otros procesos de migración que han estado relacionados con expansión de estados, instituciones y procesos de colonización”, explicó la docente.
Se habla entonces, en la Carta de los Derechos Humanos se reconocen dos derechos fundamentales: el derecho a la libre circulación y la libre residencia, lo que implica su incidencia en el planeta entero y la libertad de movilización de un país a otro; sobre todo el derecho a escoger donde residir.
Esta libertad es regulada por los estados nacionales y es responsabilidad de los estados establecer las leyes que permitan viabilizar este derecho, no obstaculizarlo… “las políticas migratorias y las medidas para que una personas ingrese a un país deberían estar encaminadas a facilitar este proceso, no ha restringirlos”.
La migración se mueve dentro de una gran paradoja; el mundo se globaliza, sin embargo la movilidad de las personas se ha restringido de tal manera que uno de los problemas más generales es la migración en condiciones irregulares; más no considerados como ilegales, ya que se rompería con el derecho a la libre circulación y movilidad. Lo ilegal se asocia con un acto delincuencial y la migración es un derecho permitido.
La investigación continúa, la realidad es diferente en las comunidades
Miguel Caguana, miembro del Centro de Desarrollo e Investigación Rural del Cañar (CEDIR), señalo que hay que partir de la realidad misma de las comunidades, es por eso que considera que el tema de migración en el Austro ecuatoriano data desde los años 60-70, pero que el trabajo es reciente dentro de la organización.
El objetivo de los estudios realizados, que inician en los años 90, dentro de las comunidades indígenas, parte de analizar el proceso migratorio, “por qué se da, quiénes se van, por qué se van, dónde se van”.
Además, el CEDIR lo que busca es estudiar el peso de las remesas en la economía campesina, “es un trabajo que inició hace cuatro meses atrás y se ha convertido en una preocupación, ya que muchas financieras piensan que con la migración hay dinero y eso no es así, no existe tal desarrollo con la migración”.
Esto se lo puede avizorar en el tema de los servicios básicos dentro de las comunidades, ya que cierto es que existe inversión en la construcción de viviendas; sin embargo no se aprecia la dotación de agua potable, alcantarillado, entre otros.
En base a los estudios recientes, Caguana aseguró que la gente migra por dos causas fundamentales: una es coyuntural, debido a la crisis política y económica suscitada en los años 90-2000, producto de la globalización liberal; la otra razón es estructural, debido al crecimiento demográfico, la tenencia de la tierra y el minifundio. Sin embargo, se puede asegurar que un 60 por ciento de los migrantes lo hacen por causas de la pobreza y por falta de empleo.
A esto se suma que el 80 por ciento de migrantes corresponden a una edad entre 20 y 40 años, pero no se descarta que un mínimo porcentaje corresponda a menores de 20 y mayores de 40 años. “El efecto de la migración es en el territorio local, regional y nacional, no solo en el exterior y estos ha generado cambios en el aspecto cultural dentro de las comunidades”, dijo Caguana.
Chimborazo: los familiares de migrantes están atentos a las remesas
Fernando Morales, presidente de Famigrach, una organización de familiares de migrantes en Chimborazo, manifestó que solo en un colegio de la localidad se ha detectado un 20 por ciento de estudiantes que tienen a sus familias fuera del país, esto dentro de una población de 3 mil estudiantes, lo que significaría que alrededor de 600 estudiantes están dentro de la problemática.
Estas cifras influyen de manera psicológica y en las relaciones interpersonales de los estudiantes, lo lamentable es que la situación en el país no ha cambiado, dijo Morales, “mucha gente salió sin pensar en el costo de los problemas que se ha generado, la desatención de los familiares ha propiciado mucha depresión, especialmente en los adolescentes”.
No existe un dato concreto de cuántos chimboracenses han migrado al exterior, pero se habla de un porcentaje que oscila los 25 a 30 por ciento de la población la que ha salido fuera del país, “no son personas extremadamente pobres, son profesionales jóvenes que no encuentran cabida para demostrar la valía que tienen”.
En cuanto a las remesas, éstas si llegan de forma normal; sin embargo se han presentado dificultades, ya que no todas las familias son honestas, esto porque no utilizan el dinero en beneficio de las personas, “conocemos que los jóvenes en productos lujosos y cosas que no necesitan”.
